Garbanzos con langostinos, así de sencillo. Es en muchas regiones españolas un potaje o guiso muy habitual, sobre todo se suelen ver mucho en la época de Semana Santa, en Andalucía se come bastante este tipo de preparación con garbanzos; pero sobre todo combinado con bacalao y espinacas, lo que se llama potaje de cuaresma o de vigilia. En esta ocasión lo cociné con langostinos en vez de bacalao y lo hice todo por separado, hasta las espinacas que eran de hoja pequeña y las pasé solo ligeramente por la sartén. Al que le gusten los garbanzos este es un platazo que no te olvidas, de los langostinos ni hablemos, a nosotros nos encantan y últimamente casi siempre los encuentro, frescos y a buen precio en el mercado central. Esta es una receta sencilla y que quedas divinamente si encima quieres mostrar un plato tradicional pero hecho de otra manera. Os lo explico, veréis que os gustará si os animáis a prepararlo y siempre es mejor probarlo en casa que en la calle, últimamente me cuesta mucho trabajo comer fuera de casa, acabo muchas veces quejándome y diciendo: -vaya pena cómo han tratado este producto y encima caro y el ruido que hay aquí es imposible-, y más cosas que digo también, pero que no las cuento...ja ja ja...vaya, que mi "santo" a veces me dice de antemano que tal sitio o tal otro no me va a gustar para que ni lo intente.
O sea que ánimo y veréis lo rápido que se hace, tiene de verdad más explicación que trabajo, es muy sencillo de hacer y con buenos productos es éxito asegurado.
Ingredientes
Garbanzos
500 gramos de Garbanzos lechosos
2 cucharadas de Aceite de oliva virgen extra
1 Tomate pera o rojo y maduros (pequeño)
1 Hoja de laurel
1/2 Pimiento rojo (fresco)
2 Cucharaditas de pimentón dulce
1 Diente de ajo
Una pizca de Sal
Langostinos al ajillo
Langostinos medianos (4 o 5 por persona)
Aceite de Oliva virgen extra
2 Dientes de ajo
1 Guindilla de Cayena (dependiendo de lo que os guste el picante)
Fumet
Las pieles de los langostinos con las cabezas incluidas
1/2 Puerro (parte blanca)
1 Tomate
1 Cucharada de aceite de oliva virgen
5 o 6 hojas de Espinacas de hoja pequeña por cada plato
(la compré ya lavada y en bolsa)
Garbanzos
- Pelamos los langostinos y reservamos las cabezas y las pieles.
- Con las pieles haremos un fumet para cocer los garbanzos.
- En una olla mediana, ponemos aceite de oliva virgen y ponemos el puerro cortado pequeño.
- Cuando esté blando añadimos el tomate cortado pequeño y refreímos un poco para añadir ahora las pieles de los langostinos con cabezas incluidas.
- Dejamos un minuto a que se refrían bien las pieles de los langostinos con la verdura.
- Añadimos agua, como dos litros aproximadamente y dejamos hervir unos 10 minutos, no más pues se nos puede estropear este fumet y volverse algo amargo. Poner un poco se sal. Con este fumet hacemos los garbanzos.
- Mientras, en una olla a presión poner los garbanzos previamente remojados desde la noche anterior.
- Añadimos una hoja de laurel y dos cucharaditas pequeñas de pimentón dulce en polvo. Removemos en seco.
- Cuando el fumet esté ya listo, lo echamos sobre los garbanzos con la ayuda de un colador de malla fina.
- Si debemos poner más agua siempre añadirla caliente, preferiblemente se ponen a cocer los garbanzos con agua caliente o templada. Si un día nos hiciera falta poner más agua en los garbanzos a mitad de la cocción, siempre poned agua caliente, si no lo hacemos así nos quedarían duros, vamos, nos se ablandarían.
- Tapamos la olla y dejamos cocinar unos 45 minutos a fuego muy bajo.
- Apartar la olla del fuego cuando estén listos los garbanzos.
- Ahora ya nos ponemos a preparar los langostinos al ajillo.
- Con la ayuda de un cuchillo de hoja fina quitamos el intestino de los langostinos, es una como una pequeña cuerdecita negra que está a lo largo de todo el cuerpo.
- En una sartén amplia ponemos aceite de oliva virgen, ajos cortados pequeños (a gusto de cada uno) y si os apetece una pequeña guindilla picante.
- Cuando empiecen los ajos a cambiar de color se echan los langostinos pelados y que tenemos limpios y en espera desde el principio. Los hacemos al ajillo.
- Cuando hayan cambiado de color los dejamos medio minuto más y los retiramos del fuego.
- En esta misma sartén (sin lavar del uso anterior de los langostinos) ponemos unas hojas de espinacas y le damos unas vueltas rápidas, deben quedar algo "al dente".
- Servimos los garbanzos, ponemos unos langostinos por encima de los garbanzos y por último las hojas de las espinacas brevemente rehogadas. Nada más. Veréis el plato tan rico que queda.
Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.
Son tres preparaciones unidas en un guiso, pero que ricas deben estar, no hay más que ver el buen aspecto del plato. En esta tierra los garbanzos con productos del mar son muy normales y la verdad es que por desconocimiento yo no era tan aficionada a ellos como ahora, cuando los preparo son un placer para el paladar y muy sanos para el cuerpo. Has preparado una comida tradicional de Semana Santa y aunque falte un poco todavía, no está mal empezar a hacer boca. Yo también he comenzado ya.
ResponderEliminarUn beso.
Lola, pues eso mismo. Tres en uno. Estaban muy buenos y tirado de hacer. Y sí ya empiezo con la onda Semana Santa para variar.
EliminarMuchos besos
Patty qué te voy a decir yo, que tú no sepas. Si es que parecemos almas gemelas, jajaja, me encanta salir a la calle, y a comer, no te lo voy a negar, porque que te lo pongan todo "frito y cocido", por delante, no le disgusta a nadie, jajaja, pero al final acabamos mi Santo y yo, como el rosario de la aurora, la mayoría de las veces, jajaja, es inevitable, no es que seamos los mejores cocineros del mundo, pero sí tenemos el listón muy alto, y es difícil engañarnos, ¡Ja, ja, ja!
ResponderEliminarEste potaje me parece magistral porque con muy poco tienes un plato de estrella. Habitualmente pongo los langostinos crudos al final, es decir en el momento de calentar para servir, y así quedan muy jugosos. Aunque la idea de ponerlos al ajillo también me encanta, la próxima vez que los cocine, lo probaré, y es que los langostinos me gustan con locura, siendo frescos y de calidad, son un bocado exquisito, al que le podemos sacar mucho partido en cualquier plato.
Seguro tus invitados acabaron bien contentos con este platazo por delante.
Besos.
Concha, es verdad que nos gustan las mismas cosas, eso de que te lo pongan a veces sí y otras ni hablar... ja ja ja
EliminarYo también lo hacía como tú, pero pensé que así era "menos potaje" y me gustaria mucho más, hay que variar. Yo como potajes... pero no es lo que más me gusta del mundo. Como también el pescado, lo como claro, pero antes prefiero otras cosas y no siempre carne aunque lo haría encantada si fuese porque no debemos.
Mis invitados tienen buen diente y aplauden casi todo. Lo que no no me lo han dicho de momento, todo se andará.
Muchos besos, amiga.
¡¡Hola Patty!! Pues a mí me ha encantado el cambio, en vez de bacalao, langostinos. Y es que me encantan los pescados, por mí comería todos los días, pero el bacalao es el único que no me gusta, como no sea el ahumado, que ese si me gusta. Así que me gusta más que hayas utilizado langostinos, además, me encantan los garbanzos. Y es cierto, una vez explicado todo el paso a paso no parece nada difícil y el resultado es magnífico. Besitos.
ResponderEliminarIsabel, me alegro que te haya gustado el cambio, pr Cádiz lo sirven a menudo con langostinos; pero en plan potaje. Esto es algo menos potaje... ja ja ja
EliminarLos garbanzos, buenos y con piel fina me vuelven loca, no siempre acierto con ellos.
Muchos besos
Estos garbanzos quedan muy ricos me gusta la combinacion de sabores besitos
ResponderEliminarInma, un plato completo y muy sencillo.
EliminarBesos
Hola Patty! Este plato no puede estar mas rico, la idea de cocer por separado me gusta porque si tengo unos garbanzos ya cocidos (que siempre tengo) es más fácil armar el plato. Por cierto que mi niña le dice chicken peas a los garbanzos, jaja, por aquello de chickpeas como le dicen en inglés, a ella le encantan, eso sí, los langostinos los dejo para mi!
ResponderEliminarFeliz día del amor y la amistad, te dejo un gran abrazo y besitos amiga!
Angélica, leo tu comentario y lo escribí pero se borró... después se me ha olvidado! Para qué mentir. Pues dile a tu chiquitita que diga garbanzos que es una palabra preciosa, así de su mamá aprenderá un bonito español, ella que puede.
EliminarPues eso, para ella los garbancitos y para ti los langostinos, di qué sí.
Besitos amiga. Abrazos a tu pequeña
Hola querida, ya lo creo que es uno de esos platos que no olvidas. La imagen de este plato te aseguro que no la olvidaré, tiene una fuerza increible. La pena es que no has hecho alguna ración más que puedas mandar directamente a Barcelona. Bueno, me aguantaré, la proxima vez piensa en mi. Je, je. Besos.
ResponderEliminarMJ, la próxima va una ración para esa ciudad tan bonita. Me encanta Barcelona, hice ahí un curso en la Escuela Masana. Vaya año, lo recuerdo con mucho cariño.
EliminarGracias por tu comentario. Feliz semana
Patty, ando adelantando un poco en esta tarde y mira que me encuentro con aquello de lo difícil que para muchas se nos hace comer por fuera, me cae como anillo al dedo tu comentario, luego de unos 18 días comiendo por fuera de casa, hasta tener cocina con la nueva mudanza y el cambio de ciudad. Que una vez, vuelves a casa, descansas porque siempre hace falta sentir esa comida casera de tu casa. Porque, así como algunas veces se agradece salir, muchas más agradezco disfrutar de platos mejores en casa, saber qué y cómo está hecho, no tiene precio. Me gustan los garbanzos como sean y así con esos langostinos que se salen por las fotos, apetecen un montón.
ResponderEliminarbesitos bonita y feliz resto de semana
Natalia, no sabía que por fin te habías cambiado de ciudad, creí entender que fuiste y volviste.
EliminarEspero que estéis bien y contentos.
Pues sí, a mí también me encantan y siempre lis prefiero en mi casa que como dices, sé lo que les pongo y lo limpio que está todo (soy muy escrupulosa... ufff)
Mil besos hacia ¿Brasil? U ¿otro país?
Feliz semana, guapa