Este pastel es típico de la preciosa ciudad andaluza de Córdoba, se prepara igualmente con o sin jamón serrano; pero yo preferí ponerselo porque me encanta ese contraste dulce-salado. Cuando estos pasteles se preparan más pequeños se les llama "manoletes", ya que Córdoba era la ciudad natal del famoso torero Manolete y que cuenta la historia que le gustaba tanto este pastel que en una de sus giras a México pidió que le preparasen algunos de estos pasteles y el pastelero se los hizo pequeños para su fácil transporte; de ahí su nombre de "manoletes".
Sé que este pastel lo voy a preparar muchas veces cuando tengamos invitados, aunque no nos ponemos de acuerdo el cuándo exactamente. Yo creo que de aperitivo estaría perfecto, un trocito claro, mi "santo" opina que de merienda o cena para un picoteo contundente, tipo merienda-cena después de un día de baños y playa dice que estaría genial, yo realmente creo que él lo que quiere es que llegue ya el buen tiempo y estar en el campo. Quién sabe, chi lo sa?.
Os recomiendo que para hacer este pastel cordobés utilicéis un hojaldre de mantequilla, es una cosa impresionante, queda más crujiente que los normales, merece la pena gastar un poquito más y comprar este hojaldre. Mirad la imagen inferior. Cuando sale del horno hay que pensar en otra cosa para no empezar a cortar y comer... por favor, moderación. Es impresionante el sabor.
Ingredientes
2 Láminas de hojaldre de mantequilla
1 Lata de cabello de ángel de 500 gramos
Jamón serrano sin tocino (cortado muy fino)
1 huevo para pintar la masa
Preparación
- Se saca la masa con tiempo del frigorífico para que no se rompa.
- Se extiende la masa sobre un papel especial para hornear y ponerlo encima de una bandeja en la que vayamos a hornear. (Más fácil para mover)
- Se pincha un poco esta masa inferior con un tenedor.
- Se extiende el cabello de ángel sobre la lámina de hojaldre.
- Cortamos las lonchas de jamón serrano, que ya las haremos pedido cortadas muy finas, luego con unas tijereras las corté en cuatro trozos, sobre todo para que sea más fácil de comer y al cortar no quedarnos con los trozos de jamón serrano colgando del pastel.
- Se echa un poco más de cabello de ángel por encima y se extiende la otra masa.
- Se coloca la masa por encima y solo se aprieta un poco con un dedo por todo el borde.
- Con un cortador de pasta se corta para que quede sellada, recta y no se abra.
- Se pincha la masa un poco de forma simétrica con la ayuda de un tenedor.
- Se bate un huevo y se pinta la masa.
- El horno ya estará caliente a 200 grados.
- La hornearemos hasta que esté dorada, la mía tardó unos 15 minutos aproximadamente. Cuidado porque se dora más bien rápido.
Nada más, ya tenemos un pastel cordobés impresionante. Os lo recomiendo de verdad.
Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.