Tarta Sacher

Una señora tarta, una cosa increíble, siempre la tuve en mente; pero no me atrevía porque pensaba que era muy difícil, craso error el mío, muy sencilla de hacer aunque como todo lleva sus pasos. Nada de prisillas con ella, todo debe ser a su tiempo y os saldrá una tan rica como esta, solo utilizar unos chocolates de primera calidad y nada más. Esta tarta es de un pastelero de Viena y la creo en el propio hotel Sacher, Franz Sacher, en 1832, han habido varios litigios con la pastelería Demel en Viena sobre la propiedad intelectual de esta tarta, que se llama Tarta Sacher original y solo si es la del propio hotel; pero ha ganado el hotel y su receta se guarda con mucho cuidado y secreto. Así que todas las recetas de esta tarta son lo más aproximadas posibles a la auténtica y original tarta Sacher.

Como os contaba pensé que era muy complicada y nada de eso. Solo hacer un bizcocho, rellenarlo de mermelada de melocotón y cubrirla con una ganaché de chocolate, dejarla enfriar sin meter en el frigorífico y ponerle un sello de chocolate (que yo no tenía) o un adorno simple como le puse yo casi a último momento.

Mirad esta porción de tarta, era muy suave.

 Ingredientes

Bizcocho  

(Molde de 20 centímetros)

6 Huevos grandes

180 gramos de Azúcar

150 gramos de Mantequilla

150 gramos de Chocolate negro, 70% cacao (como máximo porcentaje)

150 gramos de Harina especial para repostería (con levadura)

50 gramos de Almendras molidas

Relleno

225 gramos de Mermelada de melocotón 

Ganaché de chocolate (cobertura)

200 gramos de chocolate negro de cobertura Valor sin azúcar añadidos (troceado)

200 ml de Nata para montar 

(crema de leche para los hispanoamericanos)

50 gramos de Mantequilla

Decoración

Dos onzas de chocolate negro Valor

Preparación

Bizcocho

• Lo primero es encender el horno a 180 grados.
• Encamisar un molde de 20 centímetros, (enmantecar y enharinar), debe ser alto pues sube mucho.
• Se corta un círculo de papel y se coloca en el fondo del molde. 
• Se pone agua a hervir y por encima un recipiente más pequeño para derretir el chocolate y la mantequilla (imagen 3).También se puede hacer en el microondas, hay que hacerlo en varios tiempos para que no se queme. Es decir, un minuto. sacar y revolver. Volver a meter en el microondas y darle unos 30 segundos más. Revolver hasta que se deshaga completamente.
• Se baten los huevos con el azúcar, deben de quedar casi montados. Es mejor utilizar una batidora eléctrica o una procesadora de alimentos por lo menos batir 7 minutos.
• Se añade la almendra molida fina como si fuese una harina.
• Mezclamos bien.
• Ahora incorporamos a esta mezcla el chocolate con la mantequilla que hemos derretido al principio.
• A continuación y por último la harina tamizada, esto es muy importante, si no tenéis un tamizador (imagen 2) lo tenéis que hacer sobre un colador de malla fina con el objeto que la harina entre con mucho aire a la mezcla.
• Se mete en horno caliente y se deja unos 40/45 minutos. Es un bizcocho bastante denso. 
• Cuando está hecho se saca del horno y a los diez minutos se desmolda y se deja enfriar sobre una rejilla.
• Este bizcocho yo lo hice el día anterior y lo corté y lo continué por la mañana ya que la iba a servir al mediodía. Solo hay que dejarlo bien cubierto con papel de aluminio para que no se endurezca. Y solo con esto se hace más tranquilamente y sin prisas.

Relleno y corte del bizcocho 

• Una vez frío, se le quita con un cuchillo bien afilado la parte de arriba del bizcocho para quitarle esa fina costra que sale siempre en los horneados (imagen 4)
• Se le da la vuelta al bizcocho, ya que la parte que hemos cocinado hacia abajo será la parte de arriba y estará lisa y perfecta para nuestra tarta Sacher.
• Se corta con un cuchillo largo y afilado a la mitad transversalmente para sacar las dos partes, en la que irá el relleno de mermelada de melocotón. 
• La mermelada la calentamos en un recipiente pequeño en el microondas o sobre el fuego. Muy poco tiempo, es solo para poder extenderla correctamente (imagen 5)
• Extendemos una capa de mermelada caliente solo en una de las partes del bizcocho.

Ganache de chocolate para la cobertura

• Ponemos al fuego la nata líquida con 35% de grasa y cuando hierva se retira y se echa la mantequilla y el chocolate rallado o troceado pequeño para que se deshaga rápido.
• Se mezcla muy bien para que no haya ni un solo grumo.
• Se coloca encima de una rejilla con papel de aluminio o papel de horno por abajo para no manchar con el chocolate líquido.
• Se echa esta cobertura encima del bizcocho que ya hemos rellenado con la mermelada (imagen 6)
• Se alisa con una pala de repostería o algo que os ayude. Esto hay que hacerlo rápido.
• Se deja enfriar sin tocarlo y sin meterlo en el frigorífico, pues quedaría muy duro el ganache por la mantequilla que hemos usado. Lo mejor es cubrirla unas horas antes de servirla.

Decoración de chocolate

• Lo ideal es ponerle esos sellos de chocolate tan bonitos, así es la original del hotel; pero yo no los tenía, así que con un poco de chocolate negro lo derretí solo sin nada de mantequilla ni nada.
• Se puede hacer en una taza y cuando ya está derretido se mezcla bien.
• Con un pincel de silicona se pincela este chocolate derretido sobre un papel de aluminio y yo lo metí en el congelador a los 10 minutos, los despegué del papel y los coloqué encima de la tarta. Nada más.
• Importante: no se puede corregir, donde caiga la decoración hay que dejarla. Si no os gusta intentad hacer otra pieza más de chocolate y colocarla para darle el toque que os guste, pero que sepáis que si la levantas cualquier trozo de la superficie esta quedaría marcada.

Aquí en esta imagen inferior, la tarta Sacher esperando a que endureciera un poco el chocolate de cobertura sobre la rejilla a la que ya le había quitado los papeles de abajo pues ya no caía nada de chocolate.

Nada más, espero que os haya gustado esta tarta Sacher tanto como nos gustó a nosotros. Yo sé de uno que repitió tarta hasta tres veces...

Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.

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Harcha - Pan marroquí de sémola

Este pan viene también de mi día aquel que ya os conté en el taller de pan marroquí,  donde aprendimos varios tipos de panes y este lo hice hace pocos días en casa para saber cómo me quedaba. Me encantó, nos encantó. La primera vez que publiqué pan marroquí fue el batbout hecho en sartén y los baghrir  que son unos panes que se comen habitualmente con queso fresco y miel,  llamados también "creps de los mil agujeros", el otro que hice era uno que me encantó y que se llama, rghayef hecho igualmente en sartén y que es una masa que se pliega varias veces y queda buenísimo, también os lo recomiendo, en los nombres de los panes tenéis los enlaces a las recetas.

Este de hoy es muy sencillo de hacer como generalmente lo son todos estos panes planos en los que no se requieren levados, como es este, cero tiempo de levado. Hay un harcha que se hace algo dulce con una cucharadita de azúcar y un huevo y se suele servir de merienda o desayuno. Este es el harcha básico. Tengo que reconocer que soy una forofa del pan casero, siempre pienso que es un milagro, mezclar harina, agua y que salgan estas maravillas, no puedo ni imaginar a la primera persona que lo hizo y vio como con solo estos ingredientes básicos le salía del fuego este alimento tan fundamental en la dieta del hombre. Una maravilla. 

Ingredientes

500 gramos de Sémola (Mercadona)

1/2 Cucharadita de sal fina

6 cucharadas de Aceite de oliva virgen extra

400 ml. de Agua

Preparación

• Echar la cucharadita de sal a la sémola ya medida sobre un recipiente hondo
• Vamos añadiendo el agua fría, no echarla toda de golpe hacedlo poco a poco, ya que no todas las harinas absorben lo mismo.
• Mezclar solo con los dedos. No hay que amasar como si fuese una masa de pan, solo mezclar
• Añadir el aceite de oliva virgen e integrarlo bien
• Cuando nos quede una pasta (no una masa) le daremos forma de torta, son un poco más grandes que un disco CD, para que os hagáis a la idea del tamaño.
• Esto se hace tomado un poco formando una bola y aplastarla con las manos. 
• La pinchamos con un tenedor para que no se hinche.
• Ponemos una sartén al fuego (a ser posible de fondo grueso o de hierro fundido)
• No se echa nada en la sartén
• Cuando esté caliente ponemos la harcha encima y la volvemos a aplastar con la mano para hacerla más redonda.
• Espolvoreamos sémola por encima y le damos la vuelta hasta que esté doradita como unos dos minutos.

Aquí, en la imagen inferior se ve ya estirada solo con las manos y pinchada para que no se infle. Se echa por encima un poco de sémola, solo por un lado y siempre con la sartén muy caliente.

Espero que os haya gustado y si lo hacéis me contéis qué tal os ha quedado.

Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.

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Tarta de chocolate sin harina

Una señora tarta la que os presento con todos los honores, una maravilla si te gusta el chocolate, a mí personalmente me entusiasma y creo que a muchos también. Lo interesante de esta tarta es que se hace sin harina ni levadura, cosa que se agradece por original y sobre todo para los que no puedan o no quieran añadir harinas a sus vidas. Esta tarta en cuanto la vi me dejó enamorada además por lo que os he dicho otras veces, como se me antoje algo no paro hasta no probarlo (del club C.V.C.Q) y este ha sido el antojo con esta tarta de un blog muy majo que se llama "Alicia y sus recetas", ella lo ha llamado "Pastel cake de trufa al Amaretto", yo no podía llamarlo así pues no lo hice con Amaretto, a pesar de mi ascendencia italiana, no me gusta ese licor, en general no me gustan los licores, siempre prefiero los vinos dulces a un buen licor, en este caso utilicé brandy Lepanto, que lo uso siempre en la cocina pues casi nadie me pide nunca un brandy o un coñac, así que para la despensa a esperar su uso, que por cierto lo utilizo también para hacer un pollo al brandy (os dejo el enlace) que está de muerte; pero eso no es de dieta por el riesgo que hay de mojar pan y no parar. En fin, siempre pensando en mojar pan, debe ser el hambre que me gasto últimamente. Mirad, por favor la pinta que tiene esta porción, una cosa impresionante.

Aquí servida con nata. Una maravilla de rica.

 Ingredientes

200 gramos de Chocolate Negro Valor (Sin azúcares añadidos)

3 Huevos XL (o 4 si son medianos)

50 gramos de Azúcar

125 ml.de Nata Líquida 35% de grasa (para montar)

2 cucharadas soperas de Brandy (o el licor que más os guste)

Preparación

• Lo primero es poner un molde más grande de diámetro del que vayamos a utilizar con suficiente agua para que se vaya calentando en el horno, hay que calcular que el agua debe llegar a la mitad como mínimo de nuestro molde de la tarta de chocolate sin harina. Esta tarta se hace al baño María en el horno.
• Los huevos deben estar a temperatura ambiente.
• Se derrite el chocolate en microondas o al baño María en un recipiente más pequeño sobre una olla pequeña con agua hirviendo. Yo utilizo uno que compré en Lidl que es específico para derretir chocolate, os lo digo por si lo encontráis es muy útil.
• Los huevos se baten con batidora o procesadora junto al azúcar. La mezcla debe quedar casi montada y blanquecina, fijaos lo montado que está que no cae una gota de la varilla de mezcla. Se dejan a la espera en otro recipiente. (Imagen 1)
• Se mezcla el chocolate ya derretido (no muy caliente, dejadlo enfriar), con la mezcla de los huevos con el azúcar. (Imagen 2)
• Se monta la nata con el recipiente de la procesadora muy limpio y seco, si contiene restos de grasa no os montará la nata. (Imagen 3)
• Se añade a la mezcla del chocolate y se mezcla muy suavemente y con la ayuda de una lengua de repostería. (Imagen 4 y 5)

• En un molde enmantecado y con la base recortada en papel vegetal de cocina, se echa la masa y se aplana un poco. Esta masa no sube demasiado, así que no hace falta un molde muy alto. Yo utilicé uno de 18 centímetros de diámetro.
• Se le dan unos golpes secos al molde sobre la encimera de la cocina para que no quede aire entre la masa. (Imagen 6)
• Se pone al horno al baño María, 40 minutos a 180 grados. El agua del baño María ya debe estar caliente al introducir la tarta en el horno.
• Una vez fría le podéis poner una cobertura de chocolate negro o simplemente como hizo Alicia, azúcar glas y unas fresas por encima.

Nada más, así de fácil y es de verdad una tarta riquísima para los que nos gusta tanto el chocolate, os diré que no es nada empalagosa pues casi no lleva mucho azúcar en su preparación, así que yo la acompañe con unas mandarinas confitadas o también le podéis poner unos trozos de naranjas confitadas que le va estupendamente al chocolate, en verdad al chocolate le va casi todo, fresas, arándanos, grosellas, melocotones en almíbar o naturales, mermeladas o confituras y por supuesto, nata montada.

Espero que si la hacéis os guste tanto como a nosotros.

Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.

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Rollitos de pechuga de pollo rellenos

Nunca celebro los aniversarios del blog; pero en esta ocasión me he acordado que el día 14 de enero, se han cumplido ya cinco años desde que comenzó esta aventura maravillosa, donde he conocido a tantísima gente estupenda, solidaria, desinteresada, donde he aprendido de muchos de vosotros, que con generosidad y muchas veces también paciencia me han aclarado cosas que no entendía mucho (o nada), a mí nunca me ha supuesto ningún problema preguntar para así enterarme mejor y yo tranquila y directamente pregunto o investigo en Internet. Yo ya había trabajado muchos años con ordenadores, sobre todo con programas de diseño gráfico y edición; pero esto era completamente desconocido para mí, ha supuesto siempre una alegría, también es verdad que cuando comencé, una amiga me dijo: "aquí lo importante es permanecer y actualizar", en síntesis, me quería decir, que no es solo tenerlo, sino cuidarlo y yo lo quiero, lo mimo y ni os cuento las horas que le echo de tiempo y de curro, los que me estáis leyendo y si tenéis blog lo sabréis; parece una cosa "frugal", pero se convierte en una gran comilona. Bueno, muchas gracias a todos por vuestras visitas, comentarios y ayuda.

Esta receta la he preparado con unos sencillos filetes de pollo con los que podemos hacer unos ricos rollitos y rellenarlos de manera fácil y tienes un platazo en nada de tiempo, se hacen en poco más de 40 minutos. La guarnición puede ser la que más os guste, en este caso yo he utilizado la misma guarnición con la que los rellené. Creo que no hay carne más versátil que el pollo, hay mil maneras de hacerlo y siempre está riquísimo. 

Hace un tiempo hice uno del chef Ottolenghi con una receta sencilla que os dejo aquí, aunque llevaba unas especias curiosas para prepararlo como la canela y el cardamomo, este ha sido uno de mis preferidos, es un pollo hecho a la manera de Alepo (Siria); pero de muchas maneras cocinado siempre está bueno, como el simple y universal pollo asado, que es lo "más" cuando tienes hambre y lo ves tan doradito, humeante y crujiente, así hecho, de esa manera tan sencilla está delicioso; pero sobre todo que no es nada caro y le gusta a casi todo el mundo y a los niños les suele encantar, bueno, menos a mi padre que no lo podía ni ver en la cocina, nunca me enteré el porqué. 

En fin, vaya publicidad le estoy haciendo al pollo, parece que tengo una granja avícola. 
Os dejo estas imágenes para que veáis la pintaza que tenían mis humildes filetes de pollo rellenos.

Ya horneados 20 minutos y listos para cortarlos.

 Ingredientes

Filetes de pollo (uno o dos por persona)

Sal (poca, pues el jamón serrano sala bastante)

Aceite de oliva virgen extra

2 Pimientos rojos grandes

1/4 kilo de Champiñones (u otra seta)

1 Cebolla pequeña

1/2 Copita pequeña de vino tinto

Mantequilla (una nuez por rollito)

Pimienta negra

Para el relleno

Jamón serrano (una loncha por filete)

Queso de sandwich (1 loncha por filete y troceada)

Champiñones (6 rodajitas)

Pimientos rojos (los mismos que hemos hecho para la guarnición)

Cuerda de atar

Palillos (dos por filete)

Preparación

Relleno

• Se limpian los filetes de grasa o pieles.
• Se pone la loncha de jamón serrano y encima el queso una sola loncha es suficiente por cada filete.
• Se pone un poco de pimiento rojo (cortado a tiras).
• Unos pocos de champiñones en cada rollito (como unas 6 rodajas aproximadamente).
• Se enrollan y se pinchan con uno o dos palillos y se atan con un poco de cuerda.

Preparación de los rollitos de pollo

• Los pimientos se cortan en tiras y los os dejamos a fuego bajo hasta que estén blandos. Los retiramos. Solo una pequeña parte nos servirá para el relleno, el resto para la guarnición.
• En esa misma sartén hacemos los champiñones, solo hasta que estén blandos y hayan soltado el agua. Hacemos lo mismo, reservamos la mayoría de ellos para hacer la guarnición y solo unos poquitos para el relleno.
• Una vez rellenos nuestro filetes de pechuga y atados los rollitos los vamos poniendo en una sartén con aceite de oliva virgen para que se doren un poco.
• Se colocan en una fuente de horno y se les pone un poco de mantequilla por encima para que ayude al dorado de las piezas y no tarde mucho.
• Se hornean en horno ya caliente a 180 grados durante 20 minutos.
• Se les quitan los palillos y las cuerdas y se cortan en dos o tres trozos, hay que quitarles un poco de los extremos para que queden de pie sin problema.
• A rodajas finas solo se pueden cortar cuando están ya fríos y si nos han sobrado, pues se romperían al estar calientes, por este motivo los corté a lo "grande..."

Guarnición de champiñones

• Se pone en una sartén unas gotas de aceite de oliva vigen y  la cebolla cortada pequeña y cuando está pochada se agregan parte de los champiñones (parte de los que hicimos para el relleno) y la media copita de vino tinto, dejamos que evapore el alcohol. 
• Se tritura esta salsa y añadimos después el resto de los champiñones que se mezcla con esta salsa.

Pues ya están listos y buenísimos de verdad, están muy buenos al día siguiente si os sobran, se pueden acompañar con arroz o patatas o cous cous... en fin, casi todo les va bien.

Sed felices y probad hacer estas cosas tan sencillas y ricas.

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Creps de carne a la boloñesa

Bueno, pasaron las fiestas, tan, tan largas, se podrían celebrar a lo largo del año, imaginaos que en diciembre hacemos una cena, la del veinticuatro por ejemplo, en marzo la de Navidad, en abril con el buen tiempo la de nochevieja o fin de año y ahí, sí esos trajecitos de tirantes y lentejuelas, que me dan hasta frío ver a las chicas tan preciosas y tan heladas; y en mayo con un tiempo estupendo la de primero de año... me estoy riendo por las cosas estas raras que pienso, imaginad las calorías de esos cuatro días a lo largo de cuatro meses, mi dieta desde luego lo agradecería y mucho. Todo este desvarío es por el hambre que estoy pasando por la dieta severa que estoy haciendo y eso debe de resblandecerme los sesos; el hambre es muy malo y las fiestas muy largas; excesivamente diría yo, pero hay que celebrarlas, sino no me lo querría yo ni imaginar...ja ja ja

Os cuento la verdad como siempre, me había sobrado algo de salsa boloñesa una muy buena que hice para una lasagna y que aproveché para hacer estos creps, tan sencillos, sin salsas ni historias, solo hice una ensalada y listo para un almuerzo de esos corriendo y con muchas prisas, podría haber hecho una besamel y gratinarlos al horno como los "crespelle" italianos que os dejo aquí la receta, pero no era ese el plan. Una buena cosa sería tener a veces hecho alguno de estos rellenos para salir de algún que otro apuro, incluso congelado. Lo único que hice ese día fue hacer los creps; solo y exclusivamente la masa y calentar el relleno, no llevaba, como os decía ni salsa besamel ni ninguna otra, por eso era fundamental calentar el relleno. 

Podría ser perfectamente una receta de aprovechamiento, nos valdría casi cualquier relleno. Están muy ricos. La masa os la explico ahora mismo, solo me salieron dos piezas con un solo huevo, es un plato contundente. Voy a ello. 

Ingredientes

Masa de Crepes (2 Crepes grandes)

1 Huevo grande 

3 cucharadas soperas de Harina

1/2 vaso de Leche 

1 cucharadita de mantequilla o de aceite de oliva virgen extra

Sal

Pimienta (al gusto)

Relleno para creps con salsa boloñesa

250 gramos de Carne Picada de ternera y cerdo

1 diente de Ajo

Aceite de oliva virgen extra (solo el fondo de la olla)

1/2 Vaso de salsa de tomate o tomate natural triturado (de lata)

o 4 tomates frescos rallados

1/2 Copa de vino blanco o tinto

Pimiento rojo (la mitad pues son muy grandes)

1 Pimiento verde pequeño (de los de freír o los llamados también italianos)

1 Zanahoria

1 rama de apio

1 Cebolla mediana 

Sal y pimienta 

Preparación

• Se hace primero la carne, solo poniendo en una olla o en una sartén un poco de aceite de oliva virgen extra.
• Se pone primero la cebolla y el diente del ajo, cuando se hayan pochado un poco se añaden el resto de las verduras todas cortadas muy pequeñas.
• Ahora toca poner la carne picada, se le da unas vueltas y cuando haya cambiado de color se añade el vino y se deja evaporar.
• Añadimos el tomate natural triturado de lata o tres o cuatro tomates rallados.
• Dejamos a fuego bajo y semitapado 45 minutos más.

Hacemos la masa de los creps

• Ponemos la harina y el huevo en un recipiente amplio para mezclar, añadimos la sal y la pimienta, mezclamos bien.
• Añadimos o la mantequilla o el aceite de oliva virgen a la mezcla.
• Ponemos la leche y vamos revolviendo hasta que quede suave y sin grumos.
• Agregamos más leche si hiciera falta, no debería quedar muy líquida.
• Se deja reposar la masa el tiempo que está terminándose de hacer la carne.
• Se pone una sartén grande y baja con un poco de mantequilla o aceite y muy poca cantidad. Cuando esté caliente la sartén, se echa la masa con un cucharón de servir y se completa toda la superficie para que nos salga grande. Cuando esté cuajado el crep se le da la vuelta, tipo película, haciéndolo saltar o con la ayuda de las manos, si se hace rápido ni te quemas.
• Cuando está dorado se retira y se rellena.
• Servir de inmediato.

Si alguien quiere salsa, haced una besamel clarita, es decir nada de espesa; pero creo que así está muy bien para una cena o almuerzo rápido con una buena ensalada y "chimpom", como decía una persona que conocí muy graciosa y que me reía mucho con ella, cuando explicaba algo y siempre al terminar si era algo fácil terminaba con esta palabra extraña, tan infantil y tan escalarecedora.

Sed felices y probad hacer estos platos sencillos que seguro que os gusta. Es rápido y sencillo.

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Roscón de Reyes 2018

No hay día de Reyes sin un buen rosco de Reyes o un roscón, así a secas, se llama de las dos maneras, no hace falta dar muchas explicaciones pues estos roscones se compran ya hechos en cualquier panadería o pastelería y se hacen en toda España, los comprados a veces están muy ricos (otros horribles, parecen solo bollos suizos corrientes y molientes... ja ja ja), los mejores como siempre son los caseros, la cantidad y calidad de nuestras frutas confitadas y almendras laminadas que les ponemos a los nuestros no se suelen ver en los industriales, la verdad, para qué mentir. En esta ocasión le he puesto trozos laminados de mandarinas, calabaza, melón, cerezas y manzanas escarchadas, una maravilla de frutas y de confitería, siempre la compro en la misma, en el centro de Cádiz  y todos los años me pasa lo mismo, lo voy dejando y dejando para comprarlas el día anterior a prepararlo y son unas colas tremendas y encima no dan número así que como encima tiene dos puertas de entrada se arman unas buenas con las quejas, las mías entre otras, levanté la voz para que me oyeran y dije: "el año que viene me traigo los números de casa para que no haya lío y nos atiendan por orden de llegada, ¿qué les parece?,  total, cuando además es una pamplina no hacerlo antes ya que esta fruta dura mucho tiempo y no pasaría nada pues no se estropearía. Me pasa igual todos los años por vaga y no ir antes. ¡Hay que ver!

Esta receta es parecida a la que hice el año pasado, (receta aquí); pero con algunas diferencias, aunque al final casi no se nota demasiado. El secreto de este roscón es el amasado, comencé la noche anterior haciendo el fermento, que se hace en diez minutos y va al frigorífico hasta el día siguiente. 
Una amiga me comentó que había estado escuchando la amasadora casi toda la mañana, un poco de escándalo ya monta mi amasadora, mi Bimba cada vez que la encendía salía corriendo de la cocina con el rabo entre las patas y las orejas gachas... pobre, la que le di con el roscón de Reyes, debe ser la única que no querrá que llegue el día de Reyes...ja ja 

Este roscón tiene muchos tiempos cortos de amasado y el doble de reposo en cada uno de esos pasos. Este es el único secreto, un buen amasado, esperando que genere bien el gluten dejando que leve sin prisas; ningún secreto como os digo, ya que os lo he contado. Para hacerlo solo hay que tener algo de tiempo y luego casi olvidarte de él, el resultado desde luego merece la pena. 

Las frutas que he elegido en esta ocasión, mandarinas las redondas, lo verde es melón, lo rojo calabaza, lo amarillo claro manzana y las bolitas rojas cerezaas. Una delicia de verdad.

Ingredientes

Fermento

120 gramos de Harina de fuerza

90 ml. de leche 

10 gramos de levadura fresca de panadería 

1 pizca de azúcar

Masa 

60 gramos de Leche

130 gramos de Azúcar

Ralladura de la piel de una naranja

90 gramos de Mantequilla

3 huevos 

15 gramos de levadura fresca de panadería

3 cucharadas de agua de azahar 

450 gramos de harina de fuerza

1 pizca de sal

Decoración 

1 Huevo batido 

1 cucharada grande de Azúcar  

Frutas variadas confitadas o escarchadas

Almendras laminadas

Preparación Fermento

• Se templa la leche con el azúcar y se diluye la levadura revolviendo hasta su completa disolución.
• Se pone la harina con un poco de azúcar (una cucharadita) y se mezcla con las manos o una cuchara de madera.
• Se tapa con papel film y se guarda en el frigorífico hasta el día siguiente (imagen 1 fermento)

Masa

• En el vaso de la amasadora o en un recipiente grande se pone la harina con la leche, el azúcar, el agua de azahar y la pizca de sal. 
• Se mezcla bien y se añade la masa del fermento que hicimos el día anterior.
• Se añaden los huevos, poco a poco hasta que vayan uniéndose en la masa.
• Rallamos la piel de la naranja y la añadimos a la masa.
• La mantequilla la ponemos ya cortada en trozos pequeños. Los agregamos poco a poco y vamos mezclando hasta integrarla.
• Amasamos diez minutos y dejamos reposar otros cinco minutos dentro de la amasadora. (imagen 2)
• Añadimos la levadura ya disuelta en un poquito de leche o de agua templada y amasamos 5 minutos y dejamos reposar 10 minutos entre uno y otro amasado. 
• Repetimos estos dos pasos en total 4 veces.
• Dejamos en el vaso a fermentar unas tres horas aproximadamente. Debe casi triplicar el volumen. Mirad el borde del vaso, ha crecido tanto que casi se sale del vaso con lo alto que es. (Imagen 3 y 4)

 Formado y decoración 

• Lo primero es volcar esa masa ya levada y casi triplicada a la mesa de trabajo con un poco de harina, no mucha pues la mantequilla impide que se pegue a la mesa.
• La desgasificamos amasando unos dos minutos.
• Cortamos las piezas que queramos, se pueden hacer dos grandes o tres más pequeños.
• Hacemos unas bolas y empezamos a formar el primero de ellos (imagen 5)
• Se hace un agujero en el centro de la bola de masa (imagen 6)
• Empezáis a darle forma sobre la mesa de trabajo.
• Se levanta la masa y con su propio peso se va agrandando y abriendo poco a poco el agujero central, (imagen 7), lo tengo en mis manos girándolo para que "baile" un poco y se vaya haciendo grande.
• Se pone en la bandeja con papel de horno y se pinta con huevo batido (imagen 8)
• Se deja que leve otra vez unas dos horas, yo dentro del horno y tapado con un paño de cocina. Debe duplicar otra vez su volumen. Mejor ponerlo dentro del horno así estará a buen recaudo de fríos y corrientes. Yo encendí el horno a 50 grados y lo apagué enseguida.

• Una vez levado dentro del horno o en un lugar cálido (imagen 9) se vuelve a pintar con huevo y se colocan las frutas confitadas o escarchadas y las láminas de almendra al gusto de cada uno. 
• Se pone una  cuchara de azúcar en un platito y se le añade unas gotas de agua, mezclamos un poco y con ese azúcar terminamos de decorar el roscón poniéndolo por encima (imagen 10)

 Horneado 

• Se precalienta el horno a 180 grados con ventilación. Se introduce el roscón con el horno ya caliente a media altura y se deja cocer 10 minutos. A partir de esos primeros 10 minutos se tapa con un papel de aluminio para que no se nos queme y se baja un poco la temperatura y se deja otros 10 minutos más. 

Nada más, espero que os haya gustado y que disfrutéis mucho en este día tan especial del año. 

Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.

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