Os quiero dejar esta receta sencilla de pollo con arroz en paella y que preparé con pollo de campo, es decir pollos de corral, no industriales y criados en libertad, nada tienen que ver con los pollos que solemos comprar habitualmente: los de granjas avícolas industriales. Este es el secreto de un buen arroz campero, hecho como se cocinan muchos en España, con este recipiente tan característico e ideal para los arroces: la paella. Os dejo el enlace de una paella sencilla que hice hace un tiempo.
Esta es una confusión muy habitual española y extranjera y que tienen muchas personas salvo los que viven en la zona del Levante español y que lo tienen claro desde que son pequeños. Los arroces no son la paella sino que lo es este bonito recipiente normalmente de hierro fundido o esmaltado que tiene sus medidas bien marcadas, se pone el líquido hasta los bordes de la paella (parece que fuese a rebosar) y cuando ya se ha consumido y el líquido está a la altura de los "clavos" que sujetan las asas es el momento de poner el arroz y que ese líquido sea el justo para cocerlo y que quede en su punto. El arroz se calcula poniéndolo en forma de cruz, es decir derecha, izquierda y arriba y abajo con un ancho como de 5 o 6 centímetros. Se reparte después con una cuchara cada parte de la cruz de arroz hacia su lado y así todo estará cubierto de líquido en un momento. Ah! y no volverlo a tocar pues se rompería el arroz.
5 o 6 cucharadas Aceite de Oliva Virgen Extra
3 dientes de Ajo (opcional)
1 pimiento rojo (fresco)
5 Tomates rojos (grandes y maduros)
1 hoja de Laurel
Sal
Agua o Caldo de pollo
Azafrán molido
En la paella se pone el aceite de oliva y cuando está caliente se fríen todas las piezas de pollo hasta que tengan un ligero color dorado. Se pone el ajo cortado muy pequeño o grande para después quitarlo. Se añaden los tomates cortados por la mitad y rallados para que no tengan piel (esto se hace por ejemplo con un rallador de queso sobre un plato hondo y que tendrá gran cantidad de tomate rallado que iremos echando a la paella). Se le da unas vueltas para que se mezcle con el pollo. Se añade el pimiento rojo cortado (como más guste, o pequeño o más grande).
Y cuando vemos que el tomate ya está un poco frito ponemos el líquido, ya sea agua mineral o caldo de pollo (suave, no muy concentrado) y una hoja de laurel y sal. El líquido debe llegar al borde de la paella, hay que tener en cuenta que el pollo solo tiene color pero no está demasiado hecho.
Pasados 30 o 40 minutos cociendo el pollo en la paella, añadimos el arroz y el azafrán (opcional o colorante para darle color y aroma al arroz) y mezclamos.
Se rectifica de sal y se deja a fuego medio hasta que hierva el líquido (unos dos o tres minutos) se baja el fuego y se semi tapa unos 10 minutos y se apaga. Se deja bien tapado con un paño unos minutos más para que repose y se termine de hacer. Siempre es mejor un arroz un poco entero que pasado. Así que mucho cuidado, pues no tiene arreglo.
Sed felices y cocinad este arroz tan sano y natural.
Aquí os dejo el las redes sociales por si queréis echar un vistazo.
Qué interesante! Yo estaba en ese grupo de confundidos, siempre pensé que la paella era el arroz, el plato, no el recipiente. Y esa receta la voy a preparar, a mi esposo le encanta "la paella" pero siempre parece muy complicada, pero esta es buena para comenzar. Un abrazo!
ResponderEliminarAngélica, siempre este arroz sale muy rico. Ya me contarás. Besos
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