Pan de perritos calientes americanos

Otra vez con pan y este pan en concreto tenía muchas ganas de hacerlo desde hace tiempo, pues ya al haberla encontrado no me pude resistir, esta receta es del famoso libro de cocina americana de Better Home, los famosos hot dogs buns (bollos de hot dogs); me la dio una amiga hace bastante tiempo, ahí estaba guardada en un cajón, traspapelada; una nota escrita deprisa a lápiz. En cuanto la encontré no dudé en ponerla en lugar visible para hacerlo sí o sí. La verdad es que teniendo una amasadora o una Thermomix se hace bastante bien y solo hay que esperar bien los tiempos de fermentación, en este caso si no se espera, el pan podría abrirse dentro del horno y sería un desastre, ya que este pan además de rico y de tener esta miga maravillosa debe quedar vistoso y de manera que si se abre nos quedaría feo, hay que tener paciencia para que los levados se hagan a su tiempo. Espero que os guste esta receta de pan casero de perritos calientes o hot dog, seguro que lo disfrutaréis.

Ingredientes

9 Unidades de 100 gramos

500 gramos de harina de fuerza

2 cucharadas rasas de azúcar

10 gramos de sal fina 

120 gramos de leche entera

120 gramos de agua

1 huevo grande

40 gramos de mantequilla a temperatura ambiente

25 de levadura fresca disuelta en dos cucharadas de agua

Semillas de sésamo (opcional)

Pincelar

1 Huevo batido

Semillas de sésamo

Preparación

• En un vaso pequeño ponemos las dos cucharadas de agua disolvemos los 25 gramos de levadura fresca y lo dejamos en espera removiendo hasta que quede sin grumos.
• En la Thermomix o amasadora ponemos la harina de fuerza, el azúcar y la sal.
• Revolvemos unos segundos.
• Añadimos el agua y la leche. Mezclamos y empezamos a amasar. 
• Ponemos la levadura ya disuelta en el vaso de la Thermomix o la amasadora.
• Agregamos la mantequilla pomada (a temperatura ambiente)
• Añadimos el huevo y seguimos amasando.
• Debe quedar una masa lisa y brillante. 

Amasado y Levados 

• Una vez hecha la masa se pone en un recipiente de plástico untado con un poco de mantequilla para que no se nos pegue la masa. 
• Tapamos con papel film debe duplicar o algo más su tamaño, calculad casi dos horas.
• Se echa la masa del pan a la mesa de trabajo y se desgasifica suavemente.
• Se forman bolitas de masa de 90 /100 gramos y se dejan en este segundo levado unos 30 minutos. 
• Se estiran las bolas de masa con forma de rectángulo y se enrollan hasta formar un rollito (imagen inferior) dejando la costura del pan hacia abajo.
• Una vez hecho este paso se colocan sobre un papel vegetal y se dejan en un lugar cálido hasta que tripliquen su volumen.
• Se pincelan suavemente con huevo batido y se echan algunas semillas de sésamo.
• Se hornean a 190 grados unos 10 minutos. 
• Calor de horno, arriba y abajo sin ventilación. Cuidado pues se pueden tostar demasiado. En caso de que se vean muy morenos se pueden tapar con una hoja de papel de aluminio.
• Se desmoldan sobre una rejilla y se dejan enfriar para separarlos. 
• Se guardan en un tupper cerrado o envueltos en papel de aluminio y dentro de una bolsa. Duran dos o tres días sin problema,
• Se pueden congelar y quedan perfectos.

Sed felices y probad cosas sencillas como este pan casero que seguro triunfa en vuestras casas.

• Facebook de La Taza de Loza
• Pinterest de La Taza de Loza
• Instagram

Pollo a la miel y sésamo

Esta semana cumplo nueve años ya con el blog, ha sido un recorrido largo con muchas muchas recetas, acabo de ver que tengo ahora mismo 834 post publicados, me han hecho muy buenos regalos a lo largo de estos años, me han enviado las empresas cosas de la casa, muebles o útiles de menaje o electrodomésticos y que me han alegrado mucho y los he agradecido; encima he tenido la suerte de conocer a gente encantadora, generalmente de otros blogs, la verdad que salvo los que nos "roban recetas por la cara" (que ya sabéis lo que pienso de eso) somos entre nosotros muy solidarios, nos ayudamos y nos alegramos de los éxitos de los demás, para mí ha sido un placer estar y compartir tantas recetas, experiencias, retos culinarios, recetas nuevas de chefs de todas partes del mundo (todo un desafío), parrandones navideños... y sobre todo compartir comentarios que se agradecen mucho, tan solo para pensar que alguien te lee; es siempre reconfortante. 

Como he contado, de "cumpleblog" y yo confinada en mi casa hasta hoy mismo, aunque ya estoy bien, como le está pasando a medio mundo y quizá me quede corta, creo que a más de medio mundo...en fin, con medidas siempre de protección y con doble mascarilla o tapaboca como le dicen en algunos países americanos, pues nada, no ha habido nada que yo pudiese hacer  para evitarlo. La verdad es que ha sido parecido a un catarro, sin fiebre, sin nada, solo he perdido el olfato y el sabor, que estoy segura que volverá poco a poco. He estado un poco desconectada aunque sigo intentando cumplir con mis objetivos que es publicar los martes de cada semana, esto lo sigo siempre, menos cuando estoy de vacaciones que sería imposible por todo (jaleo, wifi, niños pequeños, horarios de los chicos y pocas ganas de cocinar para publicar, que ya sabéis que no es lo mismo), aunque tengo invitados asiduos que ya saben que si hay receta nueva hasta que no se hacen las fotografías no hay nada que hacer, hay que esperar a dar el visto bueno para comenzar a comer...ja, ja, ja, por lo menos las comidas de verano son fresquitas y no importa que se espere un poquito, menos el arroz que corremos una cosa mala, para hacer las fotos y que no se pase el arroz... reírnos, un montón desde luego.

En fin, esta semana he preparado este pollo con miel y sésamo, delicioso, muy sencillo, una receta tradicional china de las que podemos encontrar en cualquier restaurante asiático de cualquier parte del mundo; esta recetas son caseras y habituales como nuestros cocidos o nuestros platos tradicionales, bastante sencillos, teniendo los ingredientes, claro. Los ingredientes más importantes para este tipo de recetas son: Vinagre de arroz que siempre tengo, salsa de soja (da igual la oscura o la ligera), aceite de girasol, verduras frescas como col, zanahorias y la forma de cortarlas que es también diferente, las zanahorias suelen ser a tiras finas y la col a juliana fina, el ajo se pica o machaca y se suele freír antes para espolvorearlo.

Es verdad que tienen una forma completamente diferente de tratar los mismos productos que usamos nosotros habitualmente, pero los tratan de otra manera y eso es lo que les da ese punto distinto, los marinados, el reposo, la doble fritura, las verduras al dente, los trozos crujientes de carne, incluso con menos tiempo de cocción quedan tiernos como unas costillas de cerdo en salsa agridulce que hice hace poco, casi sin mucho tiempo de cocción quedaron tiernas y maravillosas. Entrad a verlas. 

Ingredientes

2 Pechugas de pollo (sin hueso)

Marinado de los trozos de pollo

2 Cucharadas de salsa de soja

1 Huevo

Pimienta negra o blanca

Rebozar

3 cucharadas de Maizena

3 cucharadas de harina 

Freír

Aceite de girasol

Salsa

3 Cucharadas colmas de miel

4 cucharadas de vinagre de arroz

2 Cucharadas de azúcar

1/2  Cucharadita de sal fina

2 Dientes de ajo (muy picados)

2 Cucharadas de Maizena disueltas en dos cucharas de agua

Preparación

• Se cortan las pechugas por el centro y después en tacos. 
• Se bate el huevo y en un recipiente se mezcla la soja, la pimienta negra o blanca.
• Se tapa el recipiente y se deja reposar media hora como mínimo.

• Vamos preparando la salsa: Picamos los dos dientes de ajo y disolvemos las dos cucharadas de Maizena con las dos soperas de agua.
• En una sartén o recipiente pequeño echamos aceite, solo unas gotas, freímos los ajos triturados y añadimos la mezcla de Maizena disuelta (o cualquier otra harina de maíz),
• Añadimos el vinagre de arroz, la sal fina, y las dos de azúcar. 
• Por último, ponemos la miel.
• Removemos bien y en cuanto hierva la retiramos.
• Dejamos reposar la salsa mientras freímos el pollo.

• Rebozamos los trozos de pechuga en la mezcla de harina y Maizena. Sacudimos bien para quitar el sobrante. Lo hice dentro de una bolsa, para que fuese más fácil.

• Freímos el pollo en aceite de girasol a fuego medio.
• Vamos retirando los trozos ya fritos a un plato para volver a freír después nuevamente cuando estén templados, esta segunda fritura le da un crujiente especial.
• Ponemos todo en el wok y echamos la salsa. Veréis que el pollo absorbe toda la salsa rápidamente. 
• Esparcimos unas semillas de sésamo por encima, para que se queden bien adheridas al pollo.
• Se acompaña de hojas verdes y arroz blanco también opcional. 

Nota: Este pollo queda sin salsa. 

Sed felices y probad hacer cosas nuevas. Merece la pena.

• Facebook de La Taza de Loza
• Pinterest de La Taza de Loza
• Instagram

Mejillones a la marinera con vino oloroso

Estos mejillones en cuanto los vi abiertos me quedé impresionada, ya que no siempre por ser gallegos tienen obligatoriamente que ser grandes, estos lo eran, frescos maravillosos y muy bien de precio. 

Una receta muy marinera y muy usual por Andalucía, donde normalmente se hacen así las almejas, da igual el tamaño, mientras sean frescas ya estamos todos mojando en la salsa...es inevitable. Mucho pan.  Pues nada, una deliciosa receta con ingredientes que tenemos casi siempre en casa para una semana de vuelta a nuestra extraña normalidad y con trabajo de todo tipo atrasado a montones. El otro día me contaron una gracia que me reí muchísimo, qué pena que Alexa no nos haga caso: "Alexa, quita el árbol de Navidad". Eso sería ya la bomba, llegará algo parecido, tendremos el árbol proyectado en cualquier pared de nuestra casa y listo, de hecho ya se hace en grandes empresas y, después del día de Reyes o de la Befana en Italia se apagaría el proyector y listo. Asunto terminado. Pobres niños de la casa sin poder tocar los adornos y como en todas las casas con pequeñitos que siempre acaban ellos jugando con los adornos del árbol de Navidad o con las cajas de cartón de los regalos y nosotros o los Reyes, mejor dicho pensando tanto año tras año.

Ingredientes

 Mejillones frescos

1 Cebolla mediana

2 Dientes de ajo

1/2 cucharada sopera de harina de trigo (la normal)

1 cucharada sopera de Pimentón de la Vera (o dulce cualquiera)

Media copa de vino oloroso seco o manzanilla de Sanlúcar

3 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra

Sal

Preparación

• Poner los mejillones ya lavados en la olla y cocinar a fuego bajo.
• Cuando hayan abierto se les quita la concha de arriba y se reserva el líquido. 
• En una sartén honda se pone el aceite de oliva virgen extra, ponemos los ajos y la cebolla cortada muy pequeña.
• Cuando se haya pochado y ablandado la cebolla, agregamos el pimentón dulce de la Vera (o cualquier otro pimentón dulce), haced este paso retirando brevemente la sartén del fuego. 
• Removemos bien y ponemos la harina. 
• Mezclar. 
• Agregamos los mejillones. 
• Echamos la media copa de vino (no mucho).
• Dejamos un momento al fuego y agregamos ya colada con un colador de malla fina el agua de los mejillones para aligerar la salsa y que no espese demasiado.

Nada más, listo el platazo de mejillones. Os recomiendo que ese día no falte el pan...

Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.

• Facebook de La Taza de Loza
• Pinterest de La Taza de Loza
• Instagram

Costillas de cerdo agridulces

Primero de todo, os deseo un feliz año nuevo para todos y que este 22 sea por lo menos algo más amable con nosotros que los dos anteriores, falta nos hace. Esta semana he corrido mucho por mil motivos, niños en casa, viajes, males y encima el ordenador que no hay manera que salga de la pantalla en negro... un susto, en fin, creo que medio lo he arreglado. A ver lo que dura.. poco creo yo.

Bueno, paso a contaros esta exquisita receta de la cocina china tradicional y que como casi siempre es bastante sencilla, solo lleva un truco y es freír dos veces las costillas para que queden crujientes. Ingredientes tampoco lleva muchos: col, zanahoria, cebolla, piña y una exquisita salsa agridulce casera, poco más. A mí personalmente la cocina asiática me encanta y salvo por algunos ingredientes difíciles de encontrar, el resto no es demasiado complicado. Solo echarle unas poquitas de ganas y basta. Hay ya muchos restaurantes asiáticos buenos y excelentes en España a los que poder ir cuando se tercia y entre la cocina buena china y la tailandesa hay mucha otra oferta como la cocina vietnamita, la de Hong Kong o la filipina que también es deliciosa, además de la japonesa, pero eso sí que son palaras mayores, la mayoría de estas cocinas emplean productos sencillos y salsas casi todas caseras, es decir, que se pueden hacer en casa con pocos ingredientes.

Podéis ver estas costillas hechas en wok que es como se hacen mejor, aunque con una sartén grande también se puede preparar sin problema, pero el wok es lo suyo. Solo acordaos del secreto, hay que freírlas dos veces para que adquieran ese crujiente y color rojizo característico de esta receta.

Quiero agradecer a un buen amigo estas maravillosas imágenes close up que ha hecho de mis costillas agridulces. Ya sabéis que yo no miento y es de caballeros agradecer...ja, ja, ja.

Ingredientes

800 gramos de Costillas de cerdo cortadas pequeñas

Macerar media hora 

1 Huevo batido

2 cucharadas de salsa soja 

Pimienta negra

(no lleva sal por la soja)

Rebozar

50 gramos de Harina para rebozar las costillas

50 gramos de Maizena (para rebozar también)

Verdura

4 Rodajas de piña

1 cebolla mediana

1/4 de col (corte fino)

2 Dientes de ajo picados

1 Zanahoria grande cortada a palitos

Pimientos (opcional)

2 Cucharadas de salsa soja oscura

Aceite de girasol para freír las costillas

Salsa agridulce casera

100 ml de agua

4 cucharadas de salsa ketchup

2 cucharadas de salsa soja

2 Cucharadas de azúcar

1 cucharadita de sal

1 cucharada de vinagre de arroz

Preparación 

• Se ponen a macerar las costillas con la salsa de soja, pimienta negra recién molida y un huevo batido.
• Dejar en el frigorífico media hora, tapado.
• Cortamos la verdura: la zanahoria a palitos, la col en hilos finos, la piña en cuñitas.
• Ponemos aceite de girasol y echamos los ajos.
• Rebozamos las costillas por la mezcla de la maizena con la harina para que adquieran color dorado. 
• Las sacamos cuando estén doradas y volvemos a freírlas cuando se hayan enfriado un poco en aceite caliente.
• Se fríen dos veces. Las sacamos a un plato hondo y hacemos las verduras.
• En el wok ponemos el ajo picado pequeño, las zanahorias la cebolla y a último momento la col para que quede algo al dente.
• Echamos las costillas cuando la verdura esté algo hecha y añadimos la salsa agridulce casera.
• Dejamos las costillas en la salsa con las verduras unos minutos hasta que la salsa reduzca.
• Mezclamos bien a fuego medio alto y retiramos para servir.

Rebozado y primera fritura Segunda fritura de las costillas, este paso es muy importante

Espero que las hagáis y os gusten tanto como a nosotros, estaban muy muy ricas, es un plato muy económico y encima delicioso, se hacen en menos de una hora entre una cosa y otra.

Sed felices y probad hacer cosas sana y ricas.

• Facebook de La Taza de Loza
• Pinterest de La Taza de Loza
• Instagram