Estoy leyendo un libro que me ha prestado una amiga bióloga, se llama "La enzima prodigiosa", muy interesante sobre la dieta y también bastante controvertido, habla sobre lo bueno, lo malo y lo peor de nuestra forma de vida y alimentación, está escrito por un médico y profesor de una universidad americana, el doctor japonés Hiromi Shinya, que trabaja entre Japón y Estados Unidos, medio año en cada país, gracias a él conocemos las operaciones con laparoscopio y ha descubierto y practicado muchas técnicas utilizando aparatos que se usaban por ejemplo, para el esófago y lo ha utilizado haciéndole modificaciones para operar con éxito el intestino, muy interesante, me ha parecido un hombre brillante. Un libro muy ameno pues está explicado para neófitos como yo. Da algunos ejemplos, sobre la conveniencia o no de consumir calcio, pastillas para el ardor de estómago, té, leche, carne, sobre la influencia que tiene en los músculos, estómago, huesos, intestinos...viene a decir, que lo importante es mantener nuestras enzimas madre y generar nuevas enzimas que eso es lo que nos cura y nos mantiene sanos. En un capítulo nos explica por ejemplo, las falsas creencias sobre los alimentos que tenemos muchos de nosotros, diciendo que los animales hervíboros, tienen más músculos y son más veloces que los leones, carnívoros por excelencia, que por instinto saben que no tienen la misma resitencia en una carrera que el hervíboro para una caza prolongada, por eso ellos atacan rápido, matan y comen. La conclusión es que el desarrollo de los músculos no los da ni la carne ni esas proteínas. En fin, vaya rollo os he contado y eso que no sabía qué iba a escribir en la introducción.
Vamos ya con este bizcocho, es muy fácil, nada más que mezclar bien y al horno.
Ingredientes
120 gramos de Harina con levadura
4 Huevos
1 Lata pequeña de leche condensada (370 gramos)
50 gramos de Mantequilla
Para el glaseado (opcional)
2 cucharadas soperas de Dulce de leche
Azúcar glas (a voluntad)
Preparación
- Se baten los huevos y se añade la leche condensada
- Se mezcla bien.
- Derretimos poco a poco la mantequilla (yo lo hice en el microondas)
- La añadimos y mezclamos.
- Tamizamos la harina con la levadura incorporada (en caso de no tenerla solo habría que añadir una cucharaadita pequeña de levadura tipo Royal).
- No llenar demasiado el molde, dejarlo 3/4 partes del total.
- Se hornea a 175 grados unos 30 minutos. Pinchadlo para saber que está bien hecho.
- Se saca el horno y se deja un momento enfriar y luego se desmolda.
- Por encima le puse un poco de dulce de leche y azúcar glas.
- Se calienta un poco el dulce de leche sobre el fuego o en el microondas para que sea más fácil echarlo por encima del bizcocho.
Sed felices y probad hacer cosas tan fáciles como este bizcocho, seguro que os gustará.
Utilizo la leche condensada lo menos posible, ya que es muy golosa y hace que sus recetas también lo sean con el consecuente peligro que conlleva eso. Si tuviera cerca tu bizcocho ahora, la mano se me iba para él seguro y no podría dejar de probarlo y me pasaría lo mismo a lo largo del dia.
ResponderEliminarA ver si veo ese libro que recomiendas y lo compro, me ha picado la curiosidad después de leer tus impresiones, puede ser interesante para mi también.
Un beso.
Lolam yo tampoco la utilizo mucho, pero quería probar cómo quedaba en este bizcocho y la verdad el sabor es buenísimo.
EliminarEl libro merece la pena aunque como comentaba es contrvertido, hay quien opina que no tiene base científica y otros lo alaban, tiene sentido todo lo que dice.
Besos
La leche condensada engorda, pero lo buena que está no tiene precio!! jajaja Pero todo tiene arreglo: te comes un trocito (o trocito y medio) y luego, como tú dices a hacer ejercio...
ResponderEliminarPor cierto, me ha encantado tu frase " En fin, vaya rollo os he contado y eso que no sabía qué iba a escribir en la introducción" jajaja Aunque para mí la gran pregunta es ¿y como demonios mantienes las enzimas madre? Hay cosas que se me escapan...
Abrazos y buen fin de semana!
Javier, ya sabemos todos que engorda, lo sé, pero no tiene precio como bien dices.
EliminarPara saber cómo producir y preservar las enzimas segun este médico japonés, hay que llevar una vida sana y una dieta estricta. No sé yo...Es muy interesante.
Besos, Javier y ya nos seguimos leyendo.
Hola! a mi me encanta la leche condensada, me la comería a cucharadas, jaja
ResponderEliminarTu bizcocho me lo comía con los ojos cerrados, se ve de lo más delicioso. Beso!!
Silvia, la leche condensada tiene un peligro bárbaro, pero de vez en cuando no creo que nos pase mucho, luego a correr o coger la bici. Sin remedio alguno.
EliminarMuchos besos
¡¡Hola Patty!! Al igual que a ti, me encanta la leche condensada, es cierto que la consumo poquito, pero me está muy rica, y de vez en cuando, pues me doy un capricho con ella, como un bombón descafeinado (leche condesada-café) (eso sí, tan solo con unos granitos de café), o unas fresas con leche condensada o preparaciones como esta, un bizcocho riquísimo. Es cierto que la miga es más densa, pero rico está igualmente y con ese dulce de leche que le has puesto por encima, ¡¡irresistible!! Besitos.
ResponderEliminarIsabel, en mi casa cuando era pequeña nos las ponían de postre de vez en cuando, fresas con leche condensada, (la nata no me gusta) y era uno de mis postres favoritos. Ya apenas la pruebo aunque en este bizcocho queda genial y no es demasiado dulce.
EliminarEse café bombón nunca lo he probado, será cuestión de pedirlo en alguna ocasión, aunque nunca tomo azúcar en el café ni sacarina ni nada. Quizá me resultara demasiado dulce. No sé. Lo pediré.
Me alegro que te haya gustado.
Besos
Patty este bizcocho tiene historia para mí. Hace muchos años, antes de que tuviera el blog, frecuentaba muchísimo un foro de libros donde había unos hilos para el desbarre y donde se estrechaban lazos más allá de las pantallas como pasa con nuestras cocinas.
ResponderEliminarPues bien, un jueves comentó una chica que una compañera le había pasado la receta de un bizcocho con leche condensada que a su vez se lo había pasado alguien más y la mitad del foro nos volvimos locas pidiendo la receta. Yo la primera y lo hice el sábado aún siendo una receta a ciegas ya que nadie que "conociéramos" la había preparado en casa y cómo iba a resultar.
El resultado fue muy bueno, aunque tuvo un pero. Mi marido que es tremendamente goloso me convenció para terciarle a la masa la mitad de una caja de perlas de chocolate que teníamos en casa. Se la zampamos tal cual, sin pasar por harina ni nada (entonces no conocía este truco) y se fueron todas las gotas al fonto del molde, creando una base de chocolate que complicaba el tema del desmoldado aunque no había problema ya que llegaba Javi con una cuchara y dejaba lamido el molde cada vez que cortábamos un trozo.
Un tiempo después la repetí sin chocolate y me gustó aún más, creo que aún no tenía el blog tampoco y ya no la he vuelto a hacer más. Es lo que tiene querer probar y compartir siempre recetas nuevas y diferentes.
Al ver tu entrada de hoy me han venido un montón de recuerdos y muchas ganas de repetirlo. A la lista de pendientes que pasa de nuevo porque ese glaseado de dulce de leche ¡me está llamando! ¡Besos mil!
Cuca, siendo un bizcocho sencillo es diferente con la leche condensada, queda riquísimo. Lo bueno de tener un goloso en casa es que nunca te sobra nada y se comen hasta nuestros experimentos...ja ja
EliminarCon el toque de dulce de leche por encima estaba de muerte...
Muchos besos y buena semana
La leche condensada es una delicia total, de pequeña recuerdo que vendían tubitos de leche condensada y era la más feliz de todas cuando me compraban uno de esos tubitos, entre mis primas que éramos siempre tres para arriba y para abajo la pasábamos estupendo entre juegos, helados de dulce de leche, arroz con leche, dulces de caramelo y de coco que nos traía mi abuelo y por supuesto los tubitos de leche condensada. Yo compro poca solo por no tener tentación, pero el día que la uso, la uso sin temor ni contemplación, va con toda y a ser felices!!!! que para eso hacemos ejercicio
ResponderEliminarMi rutina es igual a la tuya, bien temprano hacemos ejercicio, reposamos un poco, dejo casi listo el desayuno que es para mí la comida más importante, con muchas cositas entre esas fruta generalmente papaya con yogur y canela. Huevo tibio, rodaja de pan de centeno y semillas masa madre con un poco de mermelada casera. Y el pedazo de postre del día, llámese tarta, bizcocho, pastel, flan de leche condensada... o lo que sea con un rico café... en compañía de Mr.G es el momento más especial del día, momento en el que le meto al cuerpo el dulce del día. Ya los fines de semana sí tenemos algunas veces postre, pero es muy de vez en cuando.
Muy interesante lo que dices del libro, revisaré el autor.
un beso y buen finde!
me falto la mitad del comentario!!!! que despiste de mujer ^_^
EliminarTu bizcocho me recuerda esos tubitos, todo con leche condensada es amor total para mí, solita con fruta es puro amor goloso..., en fin. Y si lo culminas con dulce de leche pues no hay nada más que probar y a montar bici un buen par de horas.
besitos
Natalia, es que lla leche condensada a muchos nos trae recuerdos de la infancia, yo siempre la asocio a aquellas fresas con el chorreón de leche por encima que me encantaba. Ahora con la dieta no suelo comer casi nada dulce y es lo que menos me cuesta ya que nunca le he puesto azúcar a nada ni tan siquiera al café o té, a nada.
EliminarY tienes razón, después de un trocito (que sí me comí con un té con leche), al día siguiente en el gimnasio haces un poco más de esfuerzo y listo. Ahora con el tiempo tan horrible que hace aquí en Cádiz, llevo más de tres semanas que es imposible coger la bici o por la lluvia oo por los vientos que también nos gastamos por aquí. Este sábado hizo un temporal como pocos que haya visto, daba miedo.
Muchas gracias por tus comentarios. Mil besos
Presisamente me estaba tomando un cafetito con leche condensada, de esos que llaman Bombón....y qué rico me sabe...jajaja...así que ya puestos pues haremos el bizcocho, no?...jjj..Por cierto, el libro me parece super-interesante, así es que posiblemente me lo compre. Muchas gracias por el descubrimiento y....Besines!!!
ResponderEliminarHola, guapa, me ha comentado Isabel lo del "bombón" y nunca lo he probado, serça cuestión de hacerlo y a ver si me gusta. Yo no soy muy de dulce así que no estoy muy segura si me gustaría, pero hay que probarlo.
EliminarEl libro, como contaba me lo prestó una amiga y me lo leí en dos tardes, muy interesante.
Besos y buen resto de semana.
¡Uauuuu Patty! Este bizcocho tiene una pinta brutal, no veas lo bonito que se ve a través de la pantalla, yo no pensaría en calorías ni cosas de esas, mejor lo comparto con el que esté en casa a la hora del café, y así el sentimiento de culpa es mínimo, jajaja. Porque lo cierto es que de tenerlo por delante, no podría parar de cortarme trocitos hasta acabar con él.
ResponderEliminarBesos, te dejo que me están esperando los dos metros lisos, jajaja.
Concha, estaba muy bueno y me comí dos trocitos sin remordimiento alguno. Estos sabores de leche o dulce de leche me encantan, siempre que puedo y hay pido los helados de dulce de leche, es mi favorito sin duda.
EliminarEso es lo único malo de estos dulces, que vas a cada rato a la cocina de "paseo"...ja ja ja
Muchos besos y buen resto de semana, a ver si nos mejora el tiempo... que en tres días estamos en primavera y ni se nota.
Hola guapísima !!!
ResponderEliminarTodas tenemos claro que la leche condensada engorda y no es para todos los días. Directamente te diré que nunca la compro, salvo honrosas tentaciones jajaja pero es que en casa como vean el bote, llega a ser el imprescindible para todo hasta que se termina.
Te confesaré que de vez en cuando me tomo un leche-leche en la calle, que es un café con un fondo de leche condensada y un poco de leche líquida.
Bueno, que me enrollo, tu libro parece interesante y no me hubiera importado que siguieras profundizando un poco más en el tema. Habrá que indagar en el autor, que aunque no llegue a comprenderlo todo, algo queda.
Y de tu bizcocho ¿qué quieres que te diga? que me puedes cortar dos trozos al menos, que tiene pintaza total y los chorretones que le van cayendo, ya los recojo con el dedo.
Besotes mi niña.
Nuria, claro que engorda (o solo nosotros...); pero está tan rica que de vez en cuando no pasa nada y si pasa a correr al día siguiente y a quemar lo que te hayas comido y listo.
EliminarEso de "leche-leche" tiene que estar muy rico, a ver si pruebo eso en algún bar, aunque no soy muy dulcera, pero es tanto lo que me gusta la leche condensada que no sé yo... ja ja
Con respecto al libro, cuando mi amiga me lo prestó pensé que no lo iba a entender mucho y no, me equivoqué, utiliza un lenguaje para todos, se entiende y se disfruta mucho. Merece la pena leerlo, algo queda como bien dices.
Besos grandes y buena entrada a la primavera, (ya está bien de invierno, nieves y mal tiempo)¡Viva la primavera!
Uso muy poco la leche condensada en mis postres, pero no me importaría usarla un poquito más, tu bizcocho tiene una pinta irresistible, es suficiente motivo. Besitos Patty y gracias.
ResponderEliminarAlicia, yo tampoco la utilizo mucho para lo que me gusta. Este bizcocho tenía muchas ganas de hacerlo y la verdad mereció la pena. De vez en cuando a nadie le amarga un dulce o dos... ja ja ja
EliminarMuchos besos
Hola, te ha quedado un bizcocho irresistible. Nunca he puesto leche condensada pero tendré que probarlo. Las fotos te han quedado preciosas. Besos
ResponderEliminarMj yo nunca lo había hecho y sí que la miga es diferente sale más densa, no como los bizcochos a los que estamos habituadas. Muy rico y no muy dulce.
EliminarEl "golpe" de dulce de leche se me ocurrió cuando lo había desmoldado y lo vi un poco soso. ¡Para qué! Riquísmo.
Besos y buena entrada de primavera.
Me peirde la leche condensada, por eso no la compro pues me la tomo a cucharadas, jejeje!! que rico pastel se ve desde aquí que debe ser una pura delciia. Un beso
ResponderEliminarElisa, y a mí también me pierde, en Barcelona cuando estuve estudiando un año, en la residencia cuando teníamos hambre comprábamos una lata de leche de las grandes y le metíamos galletas pequeñas dentro...y a cucharadas.
EliminarCuando llegué a mi casa después de unos meses mi madre estaba asustada de lo que había esponjado... yo, claro y casi me lo prohibió, ya sabemos las madres que creo que son las únicas que te pueden prohibir algo así...ja ja ja
Besos y me alegro que te haya gustado
A mi la leche condensada me enpalaga por lo dulce que es, pero en bizcochos y postres me gusta mucho su sabor.
ResponderEliminarTe ha quedado un bizcocho delicioso.
Un besito
Raquel, a mí me encanta aunque ni la compro para no tener la tentación y eso que no soy nada dulcera. Un bizcocho rico y sencillo de verdad.
EliminarMuchos besos, Raquel y que tengas un buen comienzo de primavera.
Mira qué buenísimo este bizcocho con apenas unos pocos ingredientes y qué rico se ve, además que lo has decorado con chocolate, delicioso!
ResponderEliminarYo con las dietas bien gracias! Creo que la mejor manera es comer de todo con moderación, eso sí poco o nada de comidas procesadas, algunas son muy buenas, pero son un veneno! La comida casera es lo mejor no importa cuánto comamos!
Besos y feliz tarde!
Angélica, es verdad que la moderación es la base de todo y en este caso de la alimentación, yo nunca compro nada procesado ni casi nada congelado, pudiendo tenerlo fresco para qué lo vamos a hacer.
EliminarTe confieso que una o dos veces al año disfruto un montón con una hamburguesa de esas de marcas tan conocidas y con muchas patatas fritas y ketchup por encima... ¡ay! Qué hambre,aquí casi es la hora de cenar y no veas lo que me apetece ahora una cosa de esas que te he contado, prefiero no pensarlo y me voy a preparar ahora mismo una ensalada tamaño familiar para mí sola.
Muchos besos y me alegro de lo de tu Whatsapp. Besazos a la princesa de tu casa.
Te ha quedado estupendo, y tiene que tener un sabor para chuparse los dedos, me encanta bosos
ResponderEliminarAdita, además muy sencillo de hacer, todo lo que llevé dulce de leche me encanta... la dieta, por favor!
EliminarMuchos besos y buen finde
Hola guapa. Veo que no soy la única adicta a la leche condensada. Aquí es la cuna del café bombón y no lo tomo desde que el azúcar está fuera de mi vida. El "leche-leche" de Nuria me ha sorprendido mucho.
ResponderEliminarTu bizcocho me parece una maravilla a la que no podrip decir que no.
Besos y feliz semana.
Marisa, yo nunca lo he probado con leche condensada, ese leche-leche debe ser una maravilla. Yo no tomo azúcar ninguno en el café ni en el té, así que no estoy segura que me llegara a gustar eso tan y tan dulce.
EliminarTe deseo un buen finde, besos